El primer y gran mandamiento es amar a nuestro Creador: "Amarás al Señor tu Dios con…
“¿Eres feliz?»
¿Qué es lo esencial de la vida?
¿Qué es lo que realmente necesitas para ser feliz?
La respuesta clásica para ser feliz es tener: Salud, dinero y amor!
Pero, que es aquello que de verdad va a producir en mí el estado de satisfacción plena?
¿Cuanto hay que tener? ¿Que hay que hacer?.
El Rey Salomón también se hizo estas preguntas y sus reflexiones las asentó en el libro de Eclesiastés.
«Dije yo en mi corazón: Ven ahora, te probaré con alegría, y gozarás de bienes..» (Eclesiastés 2:1-11)
Salomón se encontró con que la acumulación de bienes, sus experiencias con todo tipo de placeres y la obtención de muchos logros no era más que un callejón sin salida:
“Aborrecí entonces la vida, pues todo cuanto se hace en ella me resultaba repugnante. Realmente, todo es absurdo; ¡es correr tras el viento!” (Eclesiastés 2:17).
Salomon llega a la conclusión de que la felicidad no tiene nada que ver con tener ni hacer.
Y que dijo Jesucristo acerca de la felicidad?
«Luego miró Jesús a los que estaban allí, y les dijo: «¡No vivan siempre con el deseo de tener más y más! No por ser dueños de muchas cosas se vive una vida larga y feliz» Lucas 12:15
Jesús dijo que la felicidad no dependía de la cantidad de bienes que el hombre posee. Al igual que Salomón, asevera que la felicidad no tiene nada que ver con tener.
En el evangelio de Mateo Jesús se dedica a describir 8 BELLAS ACTITUDES INTERNAS que portan las personas que son felices (Mateo 5:3-12)
1. «Bienaventurados los pobres en espíritu, porque de ellos es el reino de los cielos.
2. »Bienaventurados los que lloran, porque ellos recibirán consolación.
3. »Bienaventurados los mansos, porque ellos heredarán la tierra.
4. »Bienaventurados los que tienen hambre y sed de justicia, porque ellos serán saciados.
5. »Bienaventurados los misericordiosos, porque ellos serán tratados con misericordia.
6. »Bienaventurados los de limpio corazón, porque ellos verán a Dios.
7. »Bienaventurados los pacificadores, porque ellos serán llamados hijos de Dios.
8. »Bienaventurados los que padecen persecución por causa de la justicia, porque de ellos es el reino de los cielos.
Al leerlas con detenimiento nos daremos cuenta que estas 8 actitudes tienen que ver con el SER, porque según Jesucristo, la felicidad no depende de lo que sucede afuera sino dentro de nosotros.
¿Por qué Jesús hablo sobre este tema? Porque él sabe que es lo que cada persona está buscando pero que pocos encuentran.
¿ Que significa la palabra «Bienaventurado»?
Alguien que es “Dichoso”, que es inmensamente feliz, tres (3) veces feliz.
Lo interesante es que Jesus dice que quienes portan estas actitudes son sus discípulos. (vv.13,14)
«Ustedes son la sal de la tierra, ustedes son la luz del mundo!»
El primer paso para la felicidad: ES SER POBRE DE ESPIRITU
El Rey Jesús enseña: «Dichosos los pobres en espíritu, porque el reino de los cielos les pertenece..»(vs.3)
Lo que no significa:
- Tener baja condición social (conozco mucha gente de escasos recursos pero que son orgullosos)
- Tener baja autoestima
¿Qué significa SER POBRE EN ESPIRITU?
- RECONOCE SU BANCARROTA ESPIRITUAL (No que carece de valor), pero sabe que no tiene méritos propios. Reconoce su incapacidad para agradar a Dios.
- SIGNIFICA DE ESPIRITU HUMILDE:
- Tiene una actitud correcta con respecto a si mismo: “ninguno tenga más concepto de sí que el que debe tener…” Rom 12:3
- Tiene una actitud correcta con respecto a Dios: Reconoce que Dios es santo y por lo tanto es un pecador.
- TIENE UN ESPIRITU QUEBRANTADO:
La felicidad comienza cuando reconocemos nuestra incapacidad en nosotros mismos, en nuestros bienes, logros y ponemos nuestra confianza en Dios.
Y saben que es Dios quien les da el reino de los cielos por Su Sola GRACIA…Que alivio!!
¿Cómo se reconoce a un pobre en espíritu?
A. EL POBRE EN ESPIRITU VIVE CON MENOS STRESS
Sabe que no tiene todas las respuestas, que no es perfecto(a), que no tiene que resolver todos los problemas del mundo. El humilde de espíritu no trata de impresionar a Dios ni a su prójimo con lo que no es. Cuando se es humilde y camina dependiendo de Dios el estrés se reduce en su vida y la felicidad sube.
B. EL POBRE EN ESPIRITU DISFRUTA DE BUENAS RELACIONES INTERPERSONALES
¿A quiénes les encanta estar al lado de gente arrogante que se cree la “última Pepsi cola del desierto”? Aquellos que viven centrados en sí mismos. Nunca están felices, nada les satisface, hacen a la gente a su lado gente infeliz.
Por otra parte, cuantos les gusta estar al lado gente humilde? No tratan de impresionarte, de tener el mejor chiste, hacer el mejor trabajo que el tuyo. El pobre en espíritu piensa menos en sí mismo, y piensa más en los demás. Es fácil decir “lo siento” “cometí un error”, necesito ayuda”.
C. EL POBRE EN ESPIRITU PUEDE EXPERIMENTAR EL PODER DE DIOS EN SU VIDA
La humildad descarga el poder de Dios en tu vida. «Dios se opone a los orgullosos, pero trata con amor a los humildes». Santiago 4:6 (BLS)
¿Quiere ud. Experimentar el poder de Dios en su vida? La Biblia dice que el secreto del poder espiritual es caminar en humildad delante de Dios dependiendo de El.
D. EL POBRE EN ESPIRITU RECONOCE QUE NO PUEDEE PERO JESUS SI PUEDE
y Dice:
No puedo salvarme a mí mismo, pero Jesús puede.
No puedo ordenar todas las cosas en mi vida, pero Jesús puede
No puedo poner fe en el corazón de nadie, pero Jesús puede
No puedo cambiar a mi hijo, pero Jesús puede.
No puedo cambiar a mi esposo, pero Jesús puede
No puedo hacer que la gente se ame, pero Jesus puede
«¡Felices aquellos que saben que tienen necesidad de Dios, porque el reino de los cielos es de ellos!» Mateo. 5:3
¿POR QUE SON FELICES LOS POBRES EN ESPIRITU? Porque de ellos es el reino de los cielos.
PRIMERO SER, PARA LUEGO TENER. A los despreciados, a aquellos que son tan pobres que saben que no pueden ofrecerle nada a Dios, ellos son los que disfrutaran de las riquezas, dignidades y privilegios del reinado del Mesías cuando venga a instalar su reino en forma visible por toda la eternidad.
«Si sabes esta verdad, serás feliz si lo practicas” Juan 13:17
Conclusión: Acudamos a la ladera del monte, al retiro espiritual con Jesús, y aprendamos que nosotros no podemos, pero Él puede, y Él quiere que seamos su respuesta para las necesidades de la gente, la sal de la tierra y la luz del mundo.